domingo, 21 de julio de 2013

Recuerdo tus suaves labios rozando delicadamente cada centímetro de mi cuello. Tu ausencia me esta matando, quiero tenerte cerca. Sentir tu suave respiración en mi cuello y tus latidos a la par con los míos... Sin duda, me has enamorado.
Tercer día en cama sin tener nada que hacer y con ganas de hacer nada. Estar así me hace poner peor y pienso en todas las cosas que me dijiste, esas falsas promesas de que siempre estarías conmigo, que nunca dejaríamos de hablar y... adivina, ya es así, ahora ni me hablas. ¿Sabes? Estúpidamente te extraño y no sé por qué, quiero ver tus grandes ojos y tu mirada llena de alegría. Tu sonrisa perfectamente imperfecta, tu risa que hace revivir. Tus estúpidos comentarios que me sacan sonrisa incluso si solo es atraves de una pantalla... me haces falta.

sábado, 20 de julio de 2013

Te extraño...

Casi tres días sin hablar. Tú no me hablas quizás por qué y yo no te hablo por miedo. Vamos bien ¿no? Jaja... Hoy se puso a llover, ¿sabes? Me acordé de ese día en el que nos quedamos hablando hasta las 5am por Skype, tú por cámara y yo observando tu mirada con sueño y llenos de ternura, recuerdo que ese día llovía y dijiste que era hermoso ese momento y que ojalá fuera eterno... Al fin me di cuenta que todo lo que decías no eran más que palabras.

domingo, 14 de julio de 2013

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¿Por qué tiene que ser todo así? ¿Por qué no simplemente somos novios de una puta vez?  Si nos queremos tanto, nos entendemos, peleamos pero arreglamos las cosas siempre, nuestras manos calzan perfectamente, te gusta abrazarme y me gusta abrazarte. Y somos... nada.