sábado, 22 de junio de 2013

Pequeña confesión.

Bueno, no sé como empezar esto... quizás será una confesión que nunca logre mandarte, no soy lo suficientemente valiente para decir todo de una vez. Pero si por casualidades de la vida encuentras mi blog, ojalá sepas que esto va para ti.

Tú, el chico que apenas conozco desde marzo, que con tu mirada me hipnotizaste. ¿Recuerdas esos días en los que me quedaba mirando fijamente a tus ojos? Bien, es que tengo una debilidad extremadamente extraña con TUS ojos. Suelen transportarme a otro mundo y en ese lugar desconocido para mi, me pierdo.

¿No te has fijado todas las veces en las que te miro? Han sido muchas, pero hay algo especial en ti y tu forma de ser que me llama la atención.

¿Sabes tú todo lo que me cuesta hablarte? Pues, sí, es que me pone nerviosa tu mirada y las palabras no me salen.

¿Sabes todo lo que me encantan tus labios? Y que no puedo tenerlos.

Las cosas que amo de ti:

-Tus ojos.
-Tus labios.
-Tu mirada.
-Tus cejas.
-Tu nariz.
-Tus lunares en la cara.
-Tu cabello.
-Tu altura perfecta.
-Tus abrazos.

Amo cuando me miras y amo cuando me sonríes.

Cuando te miro, trato de disimular mis ganas de abrazarte y decirte lo mucho que te quiero...




Espera... que esto aun no acaba.


No hay comentarios:

Publicar un comentario